Los termos para vacunas ayudan a preservar la vida útil de refrigerantes y productos químicos, mientras cumple su función de protección para las vacunas contra la contaminación ambiental. Su principal función es impedir que el calor o los rayos solares dañen las vacunas durante su almacenamiento, ya que estas se caracterizan por su fotosensibilidad, es decir, son sensibles a la luz del sol.
Es importante que sea fabricado con materiales de calidad, ya que está destinado al cuidado de las vacunas, venenos e inyectables en general. Los colchones que posee dentro, deben ser seguros contra la humedad, el fuego o roturas accidentales como golpes fuertes que podrían romperlo por completo. Por lo tanto, es importante comprar termos resistentes al fuego y a las explosiones para evitar pérdidas graves.
De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), un termo que no ha sido abierto, es capaz de mantener la cadena de frío a una temperatura ambiente de 43 °C hasta por 36 horas . Sin embargo, si este es abierto muchas veces, la temperatura se ve notablemente reducida, provocando ineficiencia en la aplicación de las vacunas.
Importancia de la preparación de las vacunas
Al ser unidades hechas para apoyar el mantenimiento de los inyectables, los termos para vacunas cumplen un rol importante en el traslado de estos implementos a diversas zonas de un país o fuera de este, logrando así la inmunización de las personas frente a diversos tipos de enfermedades existentes, por lo que el correcto almacenamiento en los termos facilitará esta tarea.
Para esto, las refrigeradoras de vacunas cumplen el rol de guardar en mayor proporción y estabilidad estos elementos médicos, pero son bastante difíciles de transportar a zonas lejanas de su lugar inicial, además de que si no se traslada de manera correcta puede provocar daños en los inyectables. Aquí es donde los termos sirven para facilitar el uso y traslado de las vacunas, que, aunque en mayor proporción, garantizan que no sufra alteraciones.
¿Cómo se deben preparar las vacunas?
Para preparar el termo para vacunas, primero debemos sacar los paquetes refrigerantes del dispositivo de congelamiento donde se encuentra y colocarlos sobre una mesa de embalaje por alrededor de 20 o 30 minutos o hasta que el hielo haya desaparecido por completo, es decir su temperatura sea de 0 ° C. Una vez que el tiempo requerido pase, se deben colocar inmediatamente los paquetes en el interior del termo o de la caja.
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